La costilla de cerdo asada es un plato fácil de elaborar y que nos permite hacer otras cosas mientras se cocina en el horno. Únicamente debemos prestar atención en regar de vez en cuando con su propio jugo la costilla y evitar que se nos reseque. El toque especial de esta receta lo ponen la miel, que otorga un sabor peculiar y ayuda a que la superficie de la costilla se dore y el aroma a romero. Podéis acompañarla de una buena ensalada o añadir unas patatas panaderas.
Ingredientes:
- 1 kg. de costilla
- 2 cucharadas de miel
- 2 dientes de ajo
- Pimienta negra
- Sal
- 1 ramita de romero
- Aceite de oliva virgen
- 1 vasito de vino blanco
Elaboración:
En un mortero majamos los dientes de ajo con la sal y la pimienta. Una vez majado, añadimos 3 cucharadas de aceite y removemos bien.
Colocamos la costilla en una bandeja de horno, untamos con nuestro majado de ajos y añadimos un chorrito de miel encima.
Vertemos un vasito de vino blanco en el fondo y una ramita de romero.
Horneamos a 180º aproximadamente 60 minutos hasta que la carne este dorada. A mitad de cocción le daremos la vuelta y de vez en cuando regaremos con su propio jugo la costilla, añadiendo más vino blanco si se quedase muy seca.
Notas:
- Para que la carne coja mas sabor, podéis macerarla una hora antes de introducirla en el horno en el majado de ajos, pimienta y aceite de oliva e incluso añadirle una cucharadita de pimentón dulce.
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