Por su sabor «suave» y su textura, el pastel de pescado es una buena forma de que los niños introduzcan este alimento en su dieta cuando la forma tradicional no funciona. Se puede servir frió o templado, como plato principal o como entrante y utilizar aquel pescado que mas nos guste, desde la merluza y las gambas, hasta el rape o salmón. Si se quiere aligerar la receta, podemos sustituir la nata con un 35% de grasa por leche evaporada o leche desnatada. Es una receta sencilla y rápida, en la que el horno hará la mayor parte del trabajo en la cocina.
Ingredientes:
- 200gr. de merluza
- 70gr. de gambas peladas
- 250gr. de salsa de tomate
- 4 huevos
- 100gr. de nata líquida 35%
Preparación:
Cocemos la merluza en un cazo con agua hirviendo o caldo de pescado (cuanto mas sabor tenga el caldo mas sabroso quedará). A su vez, salteamos las gambas peladas en una sarten con una gotita de aceite. Un vez listo, desmenuzamos la merluza, asegurándonos de retirar todas las espinas y la piel y picamos las gambas.
Batimos en el baso de la batidora los 4 huevos junto a la merluza y las gambas, el tomate y la nata líquida, y vertemos la mezcla en un molde rectangular previamente engrasado con mantequilla y pan rallado.
Introducimos en el horno pre-calentado a 200º, aproximadamente 40-45 minutos. Pasado ese tiempo podemos comprobar que está bien hecho introduciendo el filo de un cuchillo y comprobando que sale limpio. Los tiempos pueden variar según el horno por lo que son orientativos.
Sacamos del horno, dejamos que se enfrié y para finalizar, desmoldamos.
Notas:
- A la hora de servir, una buena opción es colocar el pastel sobre una cama de lechugas variadas y acompañarlo de mayonesa o de salsa rosa según el gusto de cada uno.